martes, 29 de diciembre de 2009

El instante mágico.



Es casi un ritual de fin de año. Una costumbre.

Cuando salgo en diciembre a comprar regalitos para el árbol, me auto regalo la agenda que usaré el año que sigue.
Y hace unos años que elijo la de Paulo Coelho: "El Instante Mágico".

Y si, me gusta leer cada dia alguna frase. A veces lo que leo me sirve justo para el momento en el que ando, a veces no. A veces no me provoca nada lo que leo, y otras me deja pensando.

A veces pienso "que bien le vendría al paciente que tengo adelante que le leyera la frase de la hojita de hoy" y a veces lo hago.

A veces abro la agenda al azar para ver lo que hay, como hago en ocasiones al pasar por la biblioteca con cualquier libro.
Ya conté (en el blog privado) una ocasión en que una persona (que en su vida tocó ni medio libro del brasilero en cuestión) me dijo no entender como una terapeuta, con mucha lectura encima y devoradora compulsiva de libros de Garcia Márquez, Silvia y Hugo Bleichmar, etc, etc. tenía en esa misma biblioteca libros de Coelho que era muy "bizarro". En ese momento casi me tiento y me pongo a justificar, y creo que lo hice pero a medias, porque me di cuenta que en realidad el tema de la lectura para mi pasa por el placer, por lo que me genera un libro, una historia, un relato, una forma de contar algo.
Así que salgo muy orgullosa todos los dias con mi agenda a cuestas. Y aprovecho las palabras que algunos se privan de conocer.
"¿Qué es un instante mágico? Es el momento en el que tomamos una decisión, cuando reflexionamos sobre lo que buscamos y nos aventuramos, nos lanzamos a la conquista. Cuando percibimos que algo no nos gusta y nos atrevemos a iniciar un cambio, sin postergarlo más. Cuando salimos con coraje a cumplir nuestros sueños." P. Coelho.

jueves, 24 de diciembre de 2009

Festejos y cierres!!



Para cada uno la navidad representa algo diferente. Y desde cada lugar se celebra, se comparte y se siente de una manera particular.
A mi me gusta la sensación de festejo con los chicos. La expectativa por los regalos, el disfrute con los fuegos artificiales. Todos colaboran siempre con algo de los preparativos. Armaron el árbol juntos, Eze cortó el pasto antes que llueva para que la casa este mas linda para la noche. Luisina escribió como una gran guionista una obra para representar. Alejo practica con su batería improvisada y ensaya la obra bajo las órdenes de la directora (que también es la mujercita de la casa...obviooo).

La Navidad para mi no representa algo desde un lugar religioso. Es mas bien un momento del año en que después de hacer tantas cosas, intento relajarme, repasar y hacer los típicos balances.
Me gusta pensar en los regalos de los chicos conectandome con lo que ellos disfrutan, lo que esperan. Eso de darle a ellos algo que tenga que ver con sus intereses, decodificando y registrando al otro.

Mi balance del año no lo he terminado aún..Pasaron tantas cosas! Descubrí tantas cosas nuevas.

Si se que me sale agradecer. A mis chicos que se bancaron las largas horas de trabajo. A Viviana, la niñera que me salva las papas permanentemente, solo sabiendo que ella esta en casa me voy tranquila. A mi papá que llevó y trajo chicos cuando nosotros no llegábamos. A mi mamá y mi hermana: siempre disponibles.
A mi amiga Vir que me acompaña siempre siempre siempre.. A mi amiga Ceci que se bancó a Alejo todas las mañanas que se lo encajé para no llegar tarde al consultorio...
A Kike porque es él, y juntos laburamos esta familia.

A Claudia Travella (mi médica) que la semana pasada me salvó de una intervención y además me retó como lo merecía por correr y no parar para cuidarme un poco más.

A la gente del área de psicopatología en el que entré este año, porque confiaron en mi trabajo y respaldaron cada tratamiento. A las chicas del consultorio...descanso necesario con matecito entre algunos pacientes.

A cada paciente..porque con ellos compartí muchas de las horas de mi semana, porque hemos caminado juntos y vimos los avances de ir buscando vivir y sentirse mejor. De muchos he aprendido un montón.
Y obvio que a mis amigas bloggeras que a pesar de haber abandonado bastante mis posteos han seguido pasando por acá. A Mai, por esas noches de chat que fueron tan reconfortantes..
Y así...voy haciendo mi cierre interno del año...pensando, sintiendo, y planeando para el año que viene...no lo puedo evitar...es mi ritmo...

FELICES FIESTAS PARA TODOS!!!

lunes, 7 de diciembre de 2009

Cumplealejo feliz!!!!!

Hace 5 años llegó a nuestra familia Alejo. Un regalo luego de cinco años desde que Luisina había nacido.


Nos encontró mas experimentados como padres, sin tantos miedos como con Eze. Lo esperaban dos hermanos desesperados por conocerlo que gritaban a saltos en la cama grande "mañana nace el Alejo, mañana nace el Alejo" cuando Kike les dijo que me harian una inducción.





Alejo es un sol. Esta hace tres meses en la cuenta regresiva para su cumple y por fin llegó.
Y yo no me aguanto la ansiedad por darle su regalo sorpresa... (Shhhh: unos botines divinos!! que ahora que hace fútbol le hacen falta...)

Hoy de tarde fiesta con sus amigos, torta, velitas, globos...Y todo el dia muchos besos, mimos y lo que sea para que disfrute su dia como lo merece...






FELIZ CUMPLE bombón.... Te amo hasta el planeta "martes" yo también...

domingo, 22 de noviembre de 2009

Planeta "Martes"...



Yo: -Ale, te quiero decir algo pero tengo miedo que te enojes- (en tono de bromita)

Ale: Mami, decime tranquila que yo no me enojo, te prometo.

Yo: Es que yo te quiero hasta las estrellas..

Ale: Ay mami, que tierna!! Cómo me voy a enojar por eso!! Pero yo te quiero hasta el planeta "Martes"...

Muero de amor por este pequeño niño de cuatro años....





miércoles, 18 de noviembre de 2009




25 años de la escuela Juan Mantovani, donde cursé el secundario.
Donde aprendí a conectarme con el arte, el teatro, los libros. Donde ser la primera promoción del secundario era el estímulo perfecto para que cada profe desplegara todos sus recursos para transmitir, generar, acompañar.
Donde los timbres no existían, las reglas las armábamos entre todos y "El Goyo" (dueño y director) se sentaba a la par nuestra para charlar de algún conflicto o pedido nuestro.
Donde hacer clases al sol y con música era una costumbre.

Y volví con mis hijos después de 20 años. Y me acompañaron sabiendo todas esas cosas que me gustan de esa escuela, y saludaron a Goyo, y compartieron todo el día con mis compañeros, y nos vieron emocionarnos al abrazar a los profes. Y fueron parte de esa fiesta, la hicieron propia.

Y les agradecí, porque ahora que son mas grandes, que entienden de estas cosas, se involucraron en algo mio, lo compartieron. Y ese fue el mayor regalo del domingo de festejo. Gracias!!

martes, 10 de noviembre de 2009

Mujercitas


Escucho a mi hija hablar con una amiga mientras meriendan.
Como buenas mujeres hablan de las otras mujeres. Parece que unas compañeras de grado se pelearon y una lloró ...Toda una tragedia a esa edad.
Entonces Luisina y su amiga Martina (las dos de 9 años) hacen un recuento de sus años de amistad (desde la sala de 4):

- "Pero nosotras nunca nos peleamos mal, así de gritarnos"
- "Y menos de llorar" agregó la otra
- "Aparte aunque no nos sentáramos juntas siempre nos mandamos cartitas"
- "Si, y con la Pipi también.."
- "Claro, a lo mejor nos enojamos por algo pero nada mas, no se armó tanto lio"
- "no, para nada.."

Y salieron al patio a jugar, chisme terminado, y a otra cosa..

jueves, 15 de octubre de 2009

Y asi andamos....

Que año!
Tengo mi blog super abandonado.
Tengo muchos pacientes, algunos se van yendo de alta y los nuevos van llegando. Agradezco el trabajo, es cansador muchas veces, pero me encanta. Fue tan complicado cambiar mis ritmos!! Y ahora ya todo gira nuevamente de una manera mas fluida.

Este año es la primera vez en los ocho que transitamos por la escuela de los chicos, que no puedo ir a armar los stands para la feria de ciencias. Y me traje trabajito para el hogar, colaboramos como podemos, y de a poco logro que la culpa por eso no se me haga tan presente.
Ezequiel logró entrar al secundario que eligió, Collegium, con formación artística musical. Me siento súper feliz por verlo feliz a él. Me encanta que se le haya dado este primer gran sueño que tiene que ver con lo que le gusta hacer. Me da miedo, no voy a mentir. Algo de nostalgia por los espacios que se dejan, la escuela que elegimos cuando empezó la salita de 4. Ese lugar que a uno se le hace tan seguro. Pero el pudo elegir, pudo conectarse con un deseo, pudo decirnos, pedirnos y pudimos acompañarlo.

Alejo mientras tanto espera ansioso que mañana arranque la feria de ciencias, quiere mostrarnos todo lo que han trabajado. Pude organizarme y arrancó escuelita de deportes (fútbol y natación) imaginen lo que es una clase de fútbol de enanos de 4 años, muy gracioso. Recupere un espacio perdido, ese de salir del trabajo y "poder" llevar a mi hijo a una actividad. El esta feliz y yo tambien.

Luisina, siempre aplicadita, cumple a la perfección las indicaciones de su seño para la feria, colabora y se dispone para lo que sea. Agregó un dia mas de natación y le encanta ayudar a Alejo cuando salen de la pile a cambiarse y ordenar sus cosas.

Yo no tengo mucho tiempo para muchas cosas. Leo en algun hueco que deja un paciente faltador. O cuando el sueño no me vence apenas toco un sillón cómodo del living. Voy al gimnasio cuando el viento sopla a favor, visito amigas si se puede, pero estamos en contacto siempre.
Chateo, poco y nada. Leo todos los blogs amigos por lo menos una vez semanal, pero no siempre comento.
Me amigo a diario con el ritmo que tomo mi vida laboral. De quejarme mucho fui pasando a disfrutar muchos de los espacios adquiridos ( es que si no uno solo se queda con lo que se pierde...¿no?) Me encanta cruzarme en la cocina del consultorio con Mariela, Fabi y Vir. Me encanta tener cerquita la peatonal para darme una vueltita si un paciente falta.

Acá sigo, entonces. Posteando poco, haciendo mucho. Rearmando espacios y cumpliendo objetivos. Viendo crecer a los chicos, que se han bancado como unos maestros todas las corridas, las horas de trabajo y el cansancio. Y al final me parece que muchas veces somos los grandes los que nos complicamos pensando que si se sienten abandonados porque nos vamos mas horas, si sufren, si la culpa o el cansancio...etc... y ellos nos enseñan que pueden entender, adaptarse y encontrarnos en todo este lio....Sabios, muy sabios, por suerte.....

Les mando un besito a todos.

viernes, 11 de septiembre de 2009

Viernes

Vuelvo despues de diez horas en el consultorio.
Un respirito de media hora para comer algo fue el momento mas liberado del dia.
Una paciente muy querida en proceso de alta, otro. Matizó las horas de consultas ininterrumpidas. Pensé en la primera vez que la vi y en esta. Vi que el trabajo vale la pena.
Que ella avanzó tanto, se la ve tan linda, fuerte y poderosa.. Con recursos fortalecidos., clara con ella misma.
Vale la pena...
Sali del consultorio y Alejo que me fue a buscar con su papá ya dormia en el auto. Me pone triste, tenia muchas ganas de que nos vieramos, de charlar con él. Lo abrazo dormidito como está y espero con toda la fuerza que registre que hoy, aunque no nos vimos en todo el dia, su mamá lo abrazó con mucha fuerza, le dió muchos besos ( con el deseo interno de que se despierte..ja) y le dijo mil veces que lo ama y lo extrañó.

Llego a casa, reviso el blog despues de varios dias.
Estoy cansada. Las leo a todas, aunque no comente.
Extraño algunos tiempos.
Por ahora, bienvenido el fin de semana...

domingo, 30 de agosto de 2009

Madre ausente...

No se puede siempre viajar al ritmo que a uno le gustaría.
Las cosas pasan a su ritmo, llegan o no.
Los tiempos para las cosas cotidianas pueden correrse de lugar, y no todos pueden entenderlo.
Mucho trabajo, impostergable, tirar del carro.. Una maestra que me trata de madre ausente, porque una vez en 8 años no vi una nota en el cuaderno de mi hijo de 11 años.

La misma maestra que no registra que Eze no esta feliz en su escuela, que quiere irse, que su ciclo terminó allí.
Llegué al auto después de semejante impacto y me sentí muy mal. Es que no se puede con todo al mismo tiempo, y siempre hay alguien dispuesto a juzgar. ¿Será que todos lo hacemos en algún momento?
Cuando estaba día tras día en la escuela era genial, ahora porque necesito trabajar mas horas, soy una madre ausente...
Y me repito internamente, que hago lo que puedo.
Me digo que trabajar es parte de ser una madre presente, porque siento que lo hago para mis hijos también. Miro la agenda, todos los turnos semanales. Los pacientes que confían en mi trabajo, historias...
Madre ausente...

Si solo pudiéramos ser mas comprensivos entre nosotros, acercarnos a la realidad del otro, medir el impacto de nuestras palabras..
Ojala esa maestra nunca se sienta como me sentí yo esa mañana.
Ojala ninguna mamá que tiene que trabajar muchas horas se sienta así.
Ojala las mujeres nos pudiéramos sostener mas en estas cuestiones.

domingo, 9 de agosto de 2009

En este dia


Día del niño para los niños.

Y, ¿por qué no? para los niños internos que aún nos habitan.

Para esas ganas de salir a andar en bici, en patines. Trepar árboles.

Para los niños que fuimos y marcaron quienes somos.

Para evocar aquellos recuerdos de la infancia, donde quienes esperábamos emocionados y ansiosos la sorpresa de los regalos éramos nosotros.

Para ver reflejados en nuestros hijos nuestros momentos de ilusión, inocencia, sueños y ganas de ser grandes.

Para retomar sensaciones olvidadas, o dejadas de lado por la vida misma y por nuestro crecimiento y nuestro ser adulto que nos marca tiempos y formas distintas.


Día del niño para todos. Para los niños y para nosotros.

Para disfrutar de sus caras. De sus expresiones.

Para verlos en ese tiempo único que es la niñez. Donde el techo para los sueños es bien alto. Donde hay tanto para ver, crear, descubrir..

Día del niño para quienes acompañamos a estos niños, redescubriendo el mundo a traves de sus ojos..

jueves, 6 de agosto de 2009

Fin de un dia agitado




Te extrañé mucho.

Sos la mejor mamá del mundo.

Dejá, yo le abro a los perros.

Quiero cocinar con vos.

Te amo.

¿Puedo ir a tu cama con Pompón (conejo de peluche)?

No, en mi cama no porque te extrañé mucho.

Ma, haceme masajitos en los pies...


Buena forma de terminar un dia laaaaargo de trabajo.....

lunes, 20 de julio de 2009

Feliz día


Feliz día para mis amigos blogeros.

Para mis amigas de siempre. Para las mas nuevitas.

Para las que me acompañan en mis cosas cotidianas, con el llamadito diario, con los matecitos calientes cuando duele algo adentro. Con la necesidad de estar cerca, porque nos queremos y sentimos que somos parte de la vida de la otra.

Para las amigas del consultorio, con las que nos vemos segundos en la cocina antes de abrirle al paciente que sigue, pero son segundos que tienen esa cosa de desconectarnos de la corrida que nos lleva.

Para mi amiga que se fue, que no va a volver y que llevo en mi corazón.

Para aquellos amigos que fueron grandes amigos, pero que la vida nos rumbeó para otro lado.


En definitiva, feliz día para todos..

De mas estaría decir todas las cosas que los amigos significan..Todos las sabemos, y cada uno le pone los colores que quiere.


Gente, Feliz día y buena semana!!

sábado, 18 de julio de 2009

15 Años

Recordar. Saber las cosas que nos pasaron como pueblo, como sociedad.

Hoy de mañana comparti con Ezequiel algunas imágenes que pasaron en la tele acerca del aniversario del atentado a la AMIA en nuestro país. El miró muy atento, registró.

Me gusta que se involucre, que le interese. Que sienta enojo, que se enganche, opine. Que tenga el deseo de poder algun dia cambiar la historia.

Esta Argentina que duele muchas veces. Estas cosas que marcan caminos especiales en la historia, que conmueven, que nos hacen pensar. La injusticia, el ocultamiento, la hipocresía.

El dolor de las víctimas, de sus familias..

Este video me resultó conmovedor, fuerte, y por eso quiero compartirlo. Y de alguna manera adherirme desde acá al recuerdo de este hecho tan triste que nos pasó. Porque NOS pasó a todos.. Y eso es lo que me gusta transmitirle a mis hijos.

martes, 14 de julio de 2009

Transformarse


Se ha transformado el blog, como lo hizo mi trabajo.
Como lo hicieron mis tiempos.
Como lo hacemos todos al andar.
Como se transforman nuestros hijos ante nuestros ojos.
Porque crecen, porque expanden su mundo.

Porque alcanzan espacios que apenas los vemos chiquitos en nuestros brazos no podemos dimensionar.

Y esta transformación de los hijos son parte de la nuestra.
Porque no somos los mismos. Porque una vez que los hijos llegan, cambiamos prioridades, dejamos cosas, tomamos algunas otras.
Nos conectamos con nuestro ser interior de un modo mas profundo.
Nos transformamos en lo real, y hasta en lo que fantaseamos que seríamos una vez que la maternidad nos alcanzara.
Entonces el "nunca les voy a decir a mis hijos tal cosa que mis viejos me decían a mi...." no siempre podemos cumplirlo. Y hasta llegamos a entender desde donde nos decían, o nos pedían o nos aconsejaban. Otras cosas no las entenderemos, pero eso es parte del crecimiento también. De armar nuestra propia forma.
En ocasiones intento recordar como era aquella lejana sensación de no tener a nadie que dependa de mi. No me sale. Y eso a mi me gusta. Aunque en algun momento el "respiro" se haga necesario.
Cada vez que viajé para asistir a algun congreso, planeaba ansiosa, "tres dias sin obligaciones, sin demandas de los chicos...." Y siempre me volví antes... Aunque sea unas pocas horitas, pero es como si un relojito interno estuviera programado en relación a la tolerancia al distanciamiento de casa.. Me sale así.
Transformaciones. Cambios. Crecimiento. Encuentros.
Un poco de todas las cosas en las que ando pensando..

lunes, 29 de junio de 2009

Es lo que hay...

Y será que tenemos que explicarle a nuestros hijos que el gobierno de su país no toma medidas contra una enfermedad que se expande solo para no tener que afrontar ciertos costos políticos.
Contarles que quienes nos gobiernan pensaron primero en ellos, en no tener que suspender las elecciones, en no perder votos si la gente percibía que las cosas se les iban de las manos.

Aceptar que el respeto, la responsabilidad y la seriedad no son virtudes de quienes deberían protegernos y accionar para que cada uno de nosotros se sienta seguro y confiado.

Que nuestra vida no vale nada para los funcionarios, ministros, presidenta, etc, etc..

Que tenemos que arreglarnos como podemos, informarnos por organizaciones serias como Médicos sin Fronteras, asesorarnos por otro lado. Mirar como otros países han sabido cuidar a su gente y hacer las cosas como se debe.

Bueno, de esas cosas, pero sin tanto enojo estamos hablando con los chicos. Del valor de la vida, del cuidado, el respeto, la responsabilidad. Mientras nos preparamos para unas vacaciones de invierno mas bien al aire libre, visitando las sierras, los parques...y si hace frío, una peli en casa...

Y esa sera nuestra forma de no quedarnos con "lo que hay".. De no hacer de cuenta que acá no pasa nada. No volvernos locos, pero cuidarnos y cuidar a los demás.. Algo valioso para que aprendan nuestros hijos..

jueves, 18 de junio de 2009

Y...Esto pasó...

Y Moni, amiga bloggera de muchas de las que pasan por acá, hizo la pregunta justa para que arranque este post: en el blog privado me preguntó "¿Qué pasó con Crianza...?" Osea, con este blog.
Si, lo tengo abandonado. Me falta inspiración, o algo de eso.
Cada vez que quiero postear, me trabo. Es que en el último tiempo mi trabajo fue dando giros de muchos tipos.
Y esta bueno contestarle a Moni.
Y contarles que mi consultorio se ha poblado de pacientes nuevos, no todos con temas de crianza para resolver, es más la mayoría con otras cuestiones. El tiempo se me empezó a limitar un poco, el espacio para los grupos también, y cada caso nuevo me ha ido llevando a mirar y focalizarme en cuestiones de la clínica que exceden los temas de crianza.
Aunque soy una convencida que los temas de crianza habitan en toda psicoterapia, porque hemos sido hijos, porque somos padres o porque queremos serlo...

Y este giro en mi trabajo este año me gusta, es un desafío, y me estoy conectando con cosas de la profesión que tenía algo abandonadas.
Y eso es lo que pasa.. Que de golpe me encuentro resolviendo cuestiones en interconsulta psiquiátrica, siguiendo algun paciente de riesgo, o leyendo y releyendo actualizaciones en psicopatología y me cuesta escribir. Y tengo poco tiempo....

Quiero retomar el posteo de este espacio...Si me aguantan.. Iré volviendo de a poco.
Veremos como..

Gracias Moni, me ayudaste a escribir este post...

domingo, 31 de mayo de 2009

CUMPLEBLOG


Y, como muchas de mis amigas bloggeras, estoy festejando el primer año de mi blog.

Lo arranqué para ver que pasaba, para contar, decir. Para escribir todas esas cosas que me gusta compartir, sacar afuera.

Y en el camino encontré mucha gente que también escribe y comparte y crece y disfruta de este ratito frente a la compu.

Y tantas cosas que pasaron en este año. Mucho movimiento, muchos cambios...


Siento que a pesar de estar con poco tiempo el blog sigue andando y eso me gusta. Y sigo leyendo ansiosa los blogs que sigo para saber novedades de todas ustedes...

Así que el cumple lo festejo con todos los que han pasado por acá...

Gracias y seguimos en camino..

sábado, 23 de mayo de 2009

Vacíos


Primero contarles que estoy con muchas cosas y eso me aleja un poco de la compu.
Muchos pacientes, mucha escucha, mis chicos, las cosas cotidianas y mil más.

Y por algunas historias con las que me he cruzado en estos días, me quedé pensando en los vacíos. En las cosas que no se dicen, que no se esclarecen.
Esos huecos que van quedando en la historia de vida que transitamos como seres humanos. Silencios que lastiman más que algunas verdades dichas en el momento justo.
Y es que siendo mamás y papás, criando niños muchas veces podemos sentir que es mejor no lastimarlos hablando de ciertas cuestiones y entonces perdemos la oportunidad histórica de mostrarles que hablar esta bueno, ayuda a acomodar lo que nos pasa, aunque sea doloroso. Podemos enseñarles que con las palabras y la mirada frontal nos conectamos, nos ubicamos en un lugar de crecimiento.

¿Por qué asusta tanto hablar, escuchar, saber, nombrar?
¿Por qué escudarnos en el silencio?

Los chicos son poderosos, mucho más de lo que los adultos creemos que son. Y pueden masticar y digerir las cosas que pasan a su alrededor siempre que digamos la verdad.

Y los vacíos que van mas allá. La mirada que no llega, el aplauso que se retrasa. Las cosas lindas que no se dicen al niño que las tiene.
Las exigencias. Los mandatos. Los ideales depositados bruscamente, masivamente...
En estos tiempos han llegado al consultorio muchos estudiantes universitarios, sin poder moverse de los silencios, las palabras que no circulan, los errores marcados con fuerza. Los ideales que no pueden alcanzar, los mandatos dificiles de cumplir.
Y pensé mucho en la posibilidad que tenemos quienes estamos criando niños mas pequeños de pensar en estas cosas, de cambiar el rumbo, de sostener, acompañar, aplaudir, decir, hablar.

Son de esas cosas que estan en nuestras manos...Y eso me gusta.. Algo podremos hacer..

domingo, 3 de mayo de 2009

Con las manos en la tierra..


Así se llama esta etapa en que los chicos en la escuela preparan la tierra para sembrar.

Es una experiencia genial.

La escuela de los chicos tiene una huerta y una granja que recicla contactos perdidos con la naturaleza.

Alejo con sus cuatro años, cada miércoles se entusiasma llevando granos para alimentar a los animales y espera indicaciones para sembrar los rabanitos. Eze, que está en sexto va preparando con sus compañeros el recipiente donde pondrán a hacer el compost.

Luisina partió con sus guantes para despedazar la tierra del cantero que les tocó así pueden sembrar en buenas condiciones.

Las manos en la tierra, trabajando cada espacio, siendo protagonistas de lo que pasa con sus semillas, regando y cuidando sus propia producciones. Fabricando repelentes naturales..


Hacer, aprender en el camino, ser parte, hacerse cargo de ese espacio que se les asigna, cuidar en grupo algo común... Algo que a veces se pierde en la escuela y en general en lo que nos rodea..


Parece algo simple, pero tiene mucho por detrás.

miércoles, 22 de abril de 2009

Mirar al sol..


Vino de Uruguay mi abuela Gladys.

Alejo entonces me preguntó por mis abuelos. Le conté que mis dos abuelos habían muerto.
"¿Se murieron?" me preguntó como sorprendido y poniendo ojitos de cosa que mucho no le gusta.

"Si, estaban viejitos"

"Pero los niños no somos viejitos...¿no?"

Se va conectando con estas cosas de la vida que nos movilizan a todos. La muerte es parte, y los niños la van descubriendo a medida que en los relatos familiares se habla de ella, o que algún familiar cercano o mascota se mueren.
A la vez buscan defenderse de la idea de que eso podría pasarle a ellos o a las personas que los rodean.

Y al incorporar estas cosas crecen, van tomando noción de lo que los rodea. Como personalmente no practico ninguna religión trato de hablarle de estos procesos como naturales, como cosas que pasan.
El tema de la muerte angustia y cada uno se va conectando como puede y a su tiempo. Me gusta sobretodo poner el foco en todas las cosas lindas que tenemos por hacer y disfrutar.

En realidad es algo que ninguno de nosotros por mas adultos que seamos, tenemos elaborado del todo, siempre genera sensaciones movidas, ansiedades, angustias...

Los niños preguntan, sienten curiosidad y angustia frente al tema de la muerte, y lo mejor que podemos es responderles de manera clara, cada uno desde sus creencias y su forma de enfrentar el tema. Lo importante es no evadirnos, no negar, no dejar sus preguntas sin respuestas.

Y acá es donde siento que es muy fuerte lo que se nos genera con los hijos, sus preguntas, sus movimientos internos frente a cuestiones existenciales, porque nos hacen pensar, repensar, reacomodarnos frente a temores propios, a cuestionamientos que nosotros mismos no tenemos resueltos..
El libro "Mirar al Sol" de Irvin Yalom, me ha ayudado mucho en la mirada propia acerca del tema y en la que voy compartiendo con mis hijos a medida que preguntan.. Una cita del libro como regalo:

"No demos por sentado que enfrentar la idea de la muerte es demasiado doloroso, que pensar en ella nos destruirá, que debemos negar la transitoriedad para que esa verdad no vuelva insoportable nuestras vidas. Tal negación no es gratuita: empobrece nuestra vida interior, nubla nuestra visión, embota nuestra racionalidad. En última instancia, el autoengaño siempre termina por cobrarse su precio."

sábado, 11 de abril de 2009

Lo que hago....

Hay algo de mi trabajo que me encanta. Bueno, en realidad muchas cosas de lo que hago me gustan, por suerte.
Pero disfruto la sintonía que se genera en el consultorio entre quien consulta y yo. Yo necesito conectarme con el otro, acercarme a lo que le pasa, y no lo puedo hacer despojada de la mirada mas cercana, me ubico bastante alejada de la frialdad que algunos colegas practican como defensa diciendo que de eso depende una buena técnica.
Claro que en la tarea terapéutica una teoría nos guía, ciertos parámetros teórico-técnicos dentro de los cuales ir manejándonos son imprescindibles. Formación, supervisión, terapia..

Pero hay algo que encontré muy bien escrito por Irvin Yalom en "Un año con Schopenhauer" que quiero compartir
"siempre creí que , más que una profesión, la terapia es una vocación, una manera de vivir para gente que se preocupa por los demás.... El buen terapeuta quiere aliviar el sufrimiento, contribuir a que otra gente crezca. Los terapeutas tienen que establecer una relación con sus pacientes.
No son las ideas ni la visión ni las herramientas lo que importa realmente en la terapia. Si les pide a los pacientes al final de la terapia una devolución sobre todo el proceso, ¿qué es lo que recuerdan? Nunca las ideas. Siempre recuerdan la relación..."

Y es que en la terapia tenemos la maravillosa oportunidad de mirar al otro desde un lugar en el que pueda resignificar las viejas miradas de su historia, rearmar, reparar.
Pero nada se puede hacer si no acompañamos al otro en ese camino, con afecto, empatía y ganas de que mejore.
Recuerdo una paciente que se encontraba revisando espacios dolorosos de su historia, de sus propios fantasmas y repeticiones en su vida actual. Llegamos a un punto en el que había que animarse a entrar del todo, revisar para ver que iba saliendo y me dijo: "está bien, hay que mirar ahí, pero me asusta mucho, ¿vos me acompañas, vos te vas a quedar?".
Y esos momentos me encantan, cuando se animan, cuando crecen, cuando siento que puedo acompañarlos en algo tan intenso...

Tengo suerte de poder hacerlo.
Soy muy afortunada de poder dedicarme a algo que amo y que le hace bien a los demás...

Está bueno..

sábado, 4 de abril de 2009

Parte de la Identidad...


Pensaba lo importante que es para los chicos conocer acerca del lugar donde viven.

Lo pensaba en relación a los últimos feriados: por aniversario del golpe militar y por la guerra de Malvinas. Justo pegado a esos feriados falleció Alfonsin y se desplegó un enorme movimiento de gente. Los medios pasaron notas, imágenes y comentarios.

Ezequiel preguntó mucho, vimos algunos de los informes juntos. Va asimilando de a poco fragmentos de las cosas que pasaron en esta Argentina tan convulsionada.

Y va formando sus opiniones, y se enoja, y no entiende lo del golpe, las apropiaciones de bebés. Y se enojaba pensando en los chicos que fueron a la guerra. Hay otras cosas que no le llaman o sobre las que no pregunta tanto.
La historia del país donde vivimos es parte de la identidad que vamos formando.

Nuestros hijos son parte de esa historia. Y me encanta verlos preguntar, asimilar datos, poder mirar partes de esas cosas que nos formaron como nación y como el pueblo que hoy somos.


En el cole de los chicos hablan mucho de las cosas mas recientes de nuestra historia. Yo no tenía esa suerte, siempre nos quedábamos con el 25 de mayo y el 9 de julio, y no llegábamos nunca a las situaciones mas cercanas en el tiempo.

Eze tiene la suerte de ir a un cole donde se abren espacios para pensar y discutir. Donde me emocioné como loca cuando le tocó representar en un acto del 25 de mayo a un nieto desaparecido que se encuentra con su abuela que lo busca.

Un cole en el cual el primer 24 de marzo que el transitó escolarizado (en primer grado) vi como la directora luego de la ronda de inicio los invitaba a todos los alumnos a sentarse en el piso para charlar acerca de lo que se recuerda en esa fecha, lo triste de tantas cosas que pasaron en ese tiempo, las madres y abuelas que aún están en búsqueda...


Cada uno tiene sus formas de mirar, sus vivencias y sus posturas frente a la historia. El tema es poder transmitir, contar, hablar. Que los chicos conozcan me parece necesario y que los acompañemos en ese camino, también.. Y que el dato histórico se escape de la mera cronología de los hechos, y se cargue de lo que nos hace sentir, lo que pensamos, lo que nos duele o lo que nos ilusiona, me suena más interesante...

viernes, 27 de marzo de 2009

Varias cositas...


Estoy en medio de muchos procesos juntos.
Me esta costando escribir un post que me guste y publicar.

Entonces, de pronto supe que en realidad esto mismo que me tiene pensando y ocupada es motivo de un post.

Con el comienzo de las clases se disparó el año. Volví a atender en el centro, los pacientes regresaron de las vacaciones, Eze arrancó su último año de la primaria, Alejo hizo su adaptación en salita de cuatro.

Estoy en proyectos de trabajo, leyendo, buscando información, datos, reacomodando mis horarios según va surgiendo la necesidad de hacerlo.

Tengo un par de pacientes que estan en procesos duros, necesitan mucho de la atención, el cuidado y la mirada y me gusta responder a esas demandas con lo mejor de mi, y eso tambien conlleva un esfuerzo distinto al habitual.
Nunca pude colgarme de esas teorías que piden un alejamiento extremo del terapeuta con sus pacientes. Siempre sentí que sin la empatía, la contención, las palabras amorosas hacia el otro, no podemos ayudarlo.

Tengo mil libros que quiero leer y tiempo real de lectura tranquila, sin interrupciones contínuas, para afrontar unos tres.. o dos..

Esta semana las mañanas se me ocuparon súbitamente, el feriado me desorientó y cuando una mañana me dijo "usame como quieras" partí rapidito a casa de mi amiga Ale a tomar unos mates, es que hacía tantos años que lo hacía, que no me pude resistir a revivir esa sensación.

Trámites administrativos para unos proyectos. Papeles, fotocopias, llenado de formularios.

Chequeos médicos de rutina.

Últimos certificados de los chicos para el cole.
Ayer, pacientes. Después un ateneo al que fuimos caminando varias cuadras a contrarreloj con Vir, casi corriendo por Nueva Córdoba arriba de los zapatos y vestiditas muy bonitas, pero muy incómodas para la carrera que nos propusimos. Volver a casa a las diez de la noche.

Y en medio de tantas cosas, la casa que sigue funcionando, los chicos que tienen tareas, Alejo que quiere jugar, y la comida que tiene que cocinarse...

Cuántas cosas que vamos organizando al mismo tiempo. No quiero herir susceptibilidades de alguna parte de la platea masculina, pero nos admiro a las mujeres la capacidad de armar y hacer funcionar tantas cosas a la vez.

Son esas cosas de las que muchas veces terminamos quejándonos, porque no damos más, pero si nos salimos del cansancio que vamos sintiendo, o el poco tiempo que nos queda para algunas cosas que nos gustan: ¿No somos geniales?.
Chicas, un aplauso para nosotras, así no nos quedamos con todas las contras de hacernos cargo de tantas cuestiones simultáneamente...Por favor.

viernes, 20 de marzo de 2009

Vueltas 2..El reencuentro


Quienes leyeron el post Vueltas van a entender enseguida de que les hablo.

Después de mucho tiempo nos volvimos a encontrar las tres.
Ale esta de vuelta y ya instalada. ¡Y la tenemos a tan solo 10 minutos de auto!
Y volvimos a tomar mate tranquilas sin correr para que ella siga las visitas veloces antes de volver a España o a La Plata.
Y nos sentamos sin mirar el reloj, y hablamos, y nos reímos, y nos pasamos parte de gente de antes, y viajamos hasta ese antes y volvimos para vernos en este hoy que nos volvió a juntar.
Y la foto la sacó Josefina, aquella bebita que parecía caerse de la panza de Ale cuando estábamos terminando la facu. Y que hoy tiene 13 años. Y se mató de risa con nosotras y nos escuchaba atenta recordando y conociéndonos un poco mas a Vir y a mi.
La busqué en la escuela antes de ir a su casa y charlamos en el viaje y sentí que era un regalo poder hacer eso. Volver a estar en los momentos cotidianos de mi amiga y de sus hijos.
Cuando Vir y yo nos volvimos en el auto me vino aquella imagen de la despedida cuando Ale se fue a España, el nudo en la garganta y el lagrimón que se me escapaba. Ahora parece tan lejana.
Pensé también en Vir y yo, juntas todo este tiempo, extrañando de a ratos y generando un vínculo tan fuerte. Sosteniéndonos, y haciendo variadas estrategias terapéuticas para los momentos difíciles de cada una.
Acá estamos..La imagen lo dice todo..
Empezamos una nueva etapa de este camino que es nuestra amistad, y eso me hace muy feliz.

jueves, 19 de marzo de 2009

Esos Lugares...


Hace unos años, desde que Alejo estaba por nacer, dejé de trabajar en el centro de la ciudad.


Los chicos chiquitos, los horarios, las corridas y el tiempo de viaje que significaba me hicieron quedarme con mi consultorio en la zona norte de la ciudad de Córdoba. Mas cerca de las sierras chicas, con aire mas fresco y a un paso de casa, el cole de los chicos y los lugares en los que me muevo a diario.

Hace tres semanas, luego de pensarlo mucho, sentí que tenía que volver. El lugar: el ideal, en los consultorios donde esta mi amiga Vir, junto con la psiquiatra a quien derivo los pacientes que lo necesitan.

Me costó mucho el arranque, calcular los tiempos para poder llegar a horario, volver a lidiar con el transporte público y sus reveses. Absorver el calor que se desprende irremediablemente del asfalto. Irme lejos de casa, del lugar donde estan los chicos y al que accedo generalmente en un paso si así me lo piden de la escuela.

Ayer fue el tercer miércoles.

El horario y el tiempo ya dominados. Me fui tranquila, llegué temprano.

Entraba buena luz del sol por la ventana del consultorio, cafecito, media horita de lectura de "El dia que Nietzsche lloró". Lectura que no se interrumpió mas que por el timbre que sonó con la llegada de la primera paciente.

Trabajé tranquila, sabiendo que el tema chicos estaba arreglado, la comida también.

Cuando salí, di un paseo por el centro de la ciudad de Córdoba, me reencontré con esos viejos lugares por los que circulaba a diario cuando estudiaba psicología, entré a unas librerías, miré vidrieras, caminé por la peatonal, por la plaza...

El fastidio de los primeros dias se perdió, me reencontré con espacios con historia para mi. Con un tiempito solo mio, sin correr.

Me puedo ir sin sentir la necesidad de volver apurada a casa, los chicos tienen sus cosas, sus actividades, sus tareas que hacer.

Puedo delegar por un día. Son tiempos diferentes.

Esta bueno, empiezo a disfrutarlo..

jueves, 12 de marzo de 2009

La otra cara




Con la vuelta al cole me fui reencontrando con muchas cosas.

Algunas me encantan:
El horario de entrada y de salida de los chicos de jardín se llena de escenas de diferentes colores.
Vemos mamás que van tranquilas charlando con los chicos, otras corriendo porque llegan tarde.

Algunos papás muy trajeados haciendo malabares con la merienda compartida del jardín para que no se les caiga ni les manche la ropa.

Chicos que llegan alegres a la sala, otros que lloran agarraditos de las piernas de su mamá hasta que se animan a quedarse.
Los que van en transporte llegan en una filita india hasta la escuela y cuando pasan la puerta de entrada se dispersan cada uno rapidito a su sala.

Y estan algunas cosas que no me gustan tanto: cuando los chicos son tironeados, apurados de mala manera o con gritos. O cuando les dicen palabras o frases desvalorizantes. Cuando se les marca que siempre son lentos para andar y entonces hacen que los papás lleguen tarde al trabajo. Cuando se los empuja.

Cuando se los compara con otros niños que son "mejores" o "más rápidos" o "más valientes" porque no lloran. Son pequeños momentos que van poniendo al niño en situaciones complicadas.
A todos nos ha pasado llegar algo tarde algún día, o apurar a los niños de alguna manera, el tema es tener cuidado con lo que se dice y la forma en que se hace.

No podemos hacerlo cargo a él si nosotros no nos levantamos mas temprano o tuvimos inconvenientes.
No me cuadra el empujarlo ni tironearlo si no se quiere bajar del auto. Tampoco gritarle ni reclamarle frente a su maestra y sus compañeros.

Muchas veces estas cuestiones cotidianas, forman parte de una violencia que nos rodea y se encuentra naturalizada. A mi me irrita. Ni hablar cuando a los chicos se les va tirando del pelo, de la oreja o se les pega...y ocurre mas seguido de lo que uno esperaría.

El niño se siente humillado, expuesto, violentado. Se va generando mucha inseguridad. El vínculo que debe ser el mas seguro de su vida, en realidad lo expone y lo deja inseguro frente al mundo.

Cuando se exteriorizan estas cosas de manera recurrente, es porque detrás hay mas, una forma de vincularse violenta y que merece ser revisada, para todos: para el niño y para la familia entera. Para encontrar maneras mas sanas de relacionarse, de compartir y de crecer.
Con algo de paciencia y creatividad hay muchas maneras de estimularlos esas veces que el reloj nos persigue: proponerle una carrerita, mostrarle algun compañero que se acerca y con el cual podemos ir si nos apuramos. Contarle que sus amigos lo esperan en la sala y tienen ganas de verlo...cada uno sabrá y encontrará esa forma.
Lo que debe estar presente siempre es el respeto por el niño que nos mira, que espera que lo acompañemos y lo ayudemos en estos pequeños logros cotidianos.

Y repito a todos nos pasa que en ocasiones estamos apurados, o la paciencia no está al cien por cien, a todos nos pasa que levantamos la voz o apuramos a nuestros hijos impacientemente. No viene nada mal pedirle disculpas y explicarle que el problema no era con él, que no queríamos retrasarnos y que la mañana venía medio cruzada.

Y aunque todos tenemos esos momentos hay familias en que esa es la forma de comunicarse...Eso es lo que hay que cuidar.

jueves, 5 de marzo de 2009

Y la tristeza...pasó

Bueno, a pedido les cuento como le fue a Alejo en el arranque de clases.
El primer dia buscaba con sus ojitos curiosos a sus amigos, ¡apenas siete entre los 22 compañeros nuevos!
Nos sentamos juntos en el piso y nos quedamos un rato jugando y siguiendo a la seño Debi con sus actividades. Cuando terminó esa jornada cortita de adaptación, salió corriendo de esa sala hacia la de la seño Andrea a buscarla, y se le iluminaron los ojitos, la abrazó y le mostró todas las pruebas que aprendió en el verano con sus hermanos, la invitó al trepador y ella lo acompañó y aplaudió sus destrezas, ¡una divina total!.
Ya el segundo día se fue apropiando de su sala nueva, estuvimos mas tiempo, se fue con todos a merendar, escuchó atentamente los cuentos divertidos de la Seño nueva y también se fue conectando con ella. Descubrió que también es muy divertida, que hace caras graciosas y que inventa historias interesantísimas que el disfruta.
Se rió con las canciones que ella les cantó y hasta improvisó un bailecito.
El reencuentro con su profe de gimnasia y la seño de música, terminaron de cerrarle el asunto: ya estaba en su lugar de nuevo. Con cambios, con gente nueva, con sala nueva, pero en su lugar.
Cuando se despidió ese segundo dia de jardin y le dijo contento "chau Seño Debi" a la maestra sentí que su tristeza ya no existía, que su adaptación al cambio estaba superada. Rápido, muy rápido. Más de lo que uno a veces cree que ellos pueden hacerlo.
Sin tantas vueltas. Con seguridad, con alegría. Así es Alejo.
Así me gusta que sea. Me encanta repetir esos ciclos que pasaron hace mucho con los mas grandes, y hacerlo en la misma escuela, con la seguridad y confianza que siento como mamá en ese espacio. Supongo que será eso lo que lo deja tranquilo a él.
En fin, fue lindo volver. A mi me gustó acompañarlo....Puedo decir: "el año ha arrancado"..

(Estoy sin compu, por eso no tengo fotos para poner, estoy en un ciber y es un lío, se las debo)

jueves, 26 de febrero de 2009

"Estoy triste"


Alejo dice que esta triste.

Sabe que la salita de 3 a la que fue el año pasado fue dividida y no se encontrará con algunos de sus compañeritos.

Hoy lo volvimos a hablar porque el lunes comienzan las clases. "Mamá te equivocaste" me dijo con lágrimas en sus ojos y un pucherito que se le escapaba.

Le dije que no me equivoqué, que entraban muchos compañeritos nuevos y que sería divertido conocerlos y aprender juntos. Le nombré uno por uno a sus compañeros viejos que se quedarían junto con él y sonreía cuando los nombraba.

Pero lo que mas le molestó fue saber que en la nueva sala hay otro Alejo. Caminó hacia el sillón con su cabecita gacha y se acostó boca abajo.

Al ratito me dice: "Mami, mejor tengo 3 años y me voy a mi salita con la Seño Andrea". Le expliqué (Con un pequeño nudo en la garganta de verlo así) que si hacía eso no iba a encontrar a ningún amiguito y que serían todos muy chiquitos, y que él necesita compartir con chicos mas grandes porque creció. Además le aclaré que cada Alejo sería especial y que los querrían a los dos. Y que como el ya conoce la escuela les puede mostrar los juegos, la granja y el patio a los amigos nuevos.

Se quedó pensando y le propuse armar juntos la mochi, buscar sus cosas, elegir si quería conservar las cosas que usaba antes o comprar nuevas, eligió todo lo que llevaba el año pasado, se colgó su mochi y puso cara de contento...


Desplegó muchas cosas, miedos, pequeños duelos, necesidad de sentirse único y especial, deseo de conservar situaciones conocidas y seguras para él, ansiedad frente a la nueva seño, la salita y los compañeros. Alegría por sus amigos.
Y se agarró fuerte de todas sus cosas de la mochi para llevarlas con él y sentirse seguro. Allá iremos el lunes, de la mano para acompañarlo y verlo crecer, encontrarse con las cosas nuevas, con las de antes, con las que se transformaron. ... Me conmovió escucharlo conectado con las emociones y que pudiera contarlas..


lunes, 23 de febrero de 2009

Exigencias..


Las mamás estamos exigidas. Eso se nota en el discurso de cualquier madre.

muchas son exigencias familiares, de la pareja, los amigos, el jefe, el médico, la vecina...¿sigo?. Mejor no.

En fin exigencias..

Se nos pide eficacia desde diversos planos y lugares.

Rapidez para resolver situaciones conflictivas, ganas de salir, de acunar, de pintarnos, de sostener. Ganas de retomar la vida sexual luego del parto, de quedarnos en casa con el bebé, de salir con amigas, de leer revistas para padres, de jugar.


También esta de moda pedirnos que seamos mamás absolutamente etéreas, desconectadas de las cuestiones terrenales que nos pasan a todos los seres humanos.

Aunque en la contracara de esta moda tenemos a quienes nos señalan si creen que estamos conectandonos demasiado con nuestro lado espiritual y nos tildan de locas.

Si dormimos con el bebé, si no dormimos con él: da lo mismo siempre alguien tiene cosas para opinar. Y así con todo lo que vamos transitando mientras estamos criando, que es una camino largo y no dura solo la primera infancia de los hijos. Para nada, hay mucho más para hacer.

Todo depende de como nos llegue la mirada del otro. Si me prendo o no. Si confío en lo que hago.

Si puedo encontrar "mi" forma. Si puedo buscarla.

Pero sobretodo, si puedo no exigirme todo el tiempo.

Siento que las autoexigencias son las mas pesadas y dificiles de resolver. Por momentos creemos que todo lo hacemos mal en la crianza, y tiene que ver con lo que se juega en ella: nuestros hijos.

Entonces pienso en cuantas de esas exigencias que vienen de afuera, en realidad nos movilizan porque se acoplan con las internas, las que nos ponemos nosotras mismas. Las que nos llevan a querer encajar en el modelo de madre que nos vende una determinada revista, publicidad o experto en crianza.

Caminos. Búsquedas internas.

Confianza en nosotras mismas. Un poco de todo lo que venimos hablando en este espacio...

lunes, 16 de febrero de 2009

Se vienen las clases..


Se acercan las clases.
Los súper se van llenando de útiles.

Los chicos se van reencontrando con los amigos que vuelven de las vacaciones.

Cada uno espera cosas especiales de este año.
Se sienten mas grandes, adivinan cuales serán las maestras que les tocarán.

Las vacaciones se disfrutaron, pero los llama las ganas de ir a su cole, con sus lugares especiales, sus amigos.

Y también ese vínculo que van haciendo con los docentes los estimula. Se relacionan con otros adultos que no son sus papás, generando códigos propios, actividades y aprendizajes de todo tipo.
Hay ansiedad, curiosidad, expectativas.

El año se va poniendo en marcha. Dos semanas para tomar envión y organizar horarios, actividades extraescolares, reuniones, tareas...
Compartir con los chicos estos momentos de prepararse para las clases es importante.

Elegir los útiles, la mochi y todos los accesorios necesarios. Participar, estar ahí para saber como se sienten, que esperan. Acompañarlos.

Para ellos es algo importante y para nosotros también.. Podemos transformar las corridas del arranque en algo para compartir. Tomarnos algo mas de tiempo, pero dejar que ellos participen de los preparativos. Formar parte de momentos tan importante para ellos les da seguridad, confianza y se sienten contenidos. Hasta ponen otro entusiasmo.

Es que si solo nos quedamos con: lo terrible que es andar comprando tantas cosas, que los precios, que las listas, que la gente buscando lo mismo...ellos lo viven como si estuvieran generando malestar.

Arranque de la escuela, aprovechemos para estar con ellos. Mirarlos. Hacerles saber que estamos ahí. Y de paso disfrutemos nosotros también.

miércoles, 11 de febrero de 2009

Los No


El post de Mai me dejó con esto dando vueltas.
Las demandas de los chicos, los tiempos que corren por carriles particulares, las vivencias que les traen el crecimiento, el registro de los otros, los deseos que no se pueden cumplir.

Tanto se ha escrito sobre límites que termina por marearnos o desvirtuamos lo importante de ponerlos. Pero no desde el estricto lugar de NO porque NO. No desde la lucha por ver si el poder es nuestro o de los hijos.

El límite desde el amor, ese que nos enseña que hay otros seres humanos con necesidades distintas a las nuestras. El que nos recuerda que esperar y tolerar es sano, necesario y positivo. Ese que nos hace pertenecer a una familia, a una sociedad. El que nos hace pasar de ser unos bebés que lloramos para pedir, a ser niños y luego adultos inmersos en la palabra, en el decir, contar, pedir y tolerar.

Ese límite que nos cuenta que no todo es posible sin morir con el descubrimiento. El que nos hace buscar caminos diferentes para buscar eso que queremos obtener.

El límite que nos marca hasta donde puedo llegar con ciertas cosas y personas.

El que nos frustra para volver a empezar.

El límite que se va haciendo presente desde esa vivencia de que mamá tiene otras cosas aparte de cuidarme y responder a mis pedidos. El que aparece cuando ella se va y regresa.

El que se siente cuando me dice "esperá". Sin que eso signifique desamor o abandono.
Muchas veces nos cuestan los no. Otros los dicen en exceso.

Podemos sentirnos malos, duros, sobretodo cuando la respuesta de los niños son berrinches, llantos, malestar.

Pero el gran tesoro que traen estas vivencias es preparación para la vida, para el registro del otro, para la convivencia en diferentes ámbitos.

Siempre pienso que cuando nuestros hijos salen al mundo comparten espacios donde no son "unicos", habrá otros niños, maestros, luego profesores, jefes, compañeros de trabajo y así muchas relaciones. Y las relaciones con los otros siempre traen algunos no, otras tantas frustraciones, y la necesidad de poder acomodarnos para vivir, para convivir, compartir, crecer y caminar desde allí.


Liliana González en su libro "Amor, sexualidad y educación" describe algunos límites estructurales que esta bueno compartir:

"Límite al pecho, a la higiene hecha por mamá cuando ya pueden solos, al nudismo de los adultos, ente otros.
Límites para organizar tiempos y espacios para poder crear hábitos y rutinas.
Límites para proteger su vida: enchufes, techos, balcones.
Límites para preservar a los padres. Donde no se permitan las agresiones verbales ni físicas a los padres.
Límites para cuidar los objetos, como guardar y reparar juguetes para valorarlos.
Límites para distinguir lo propio de lo ajeno. Límites para aprender a convivir: compartir, colaborar, no agredir, esperar.
Aceptar un límite es renunciar a un deseo y eso no es fácil para nadie. Si lo hace es por amor a los padres, o porque termina entendiendo que un NO paterno protege, cuida, ampara, contiene."




Esas cosas pensaba. De estas cuestiones hay mucho para pensar, y cada uno tomará lo que le sirva, aprendemos mientras hacemos. Cuestan los no, pero que necesarios son..

lunes, 2 de febrero de 2009

Animarse..


Escuchaba una conversación entre dos mamás en la sala de pediatría. Una de ellas relataba sus incursiones prácticas en las recomendaciones del "duérmete niño". Los minutos exactos que debía dejar llorar a su bebé antes de entrar a la habitación y el esfuerzo que tenía que hacer para no alzarlo. Decía que su instinto era tenerlo en brazos, acunarlo, pero que recordaba que así el bebé haría con ella lo que quisiera entonces desistía de la idea y seguía esperando a que se calme.


Me quedé pensando en esto del instinto. De no escucharlo, de no permitirse.

Hacer un esfuerzo para no actuar como la naturaleza se lo indica. ¡Cuántas cosas se jugarían internamente en ella en esos momentos!

Y el miedo, miedo de ser tiranizados por un bebé.

Sensaciones fuertes y poco permiso para el disfrute. Situaciones cotidianas que pueden ser resueltas de manera natural y simple, llevadas a complejos momentos de desestructura para la mamá y el bebé que no entiende por qué no accede a los brazos de su madre.
Es cierto que cada madre elige su forma de criar a su niño. Lo hace de acuerdo a su propia historia y sus vivencias mas primarias.

Pero esta bueno que se encuentre realmente con ese modo particular de criar, escuchando lo que su naturaleza, su instinto le marca.

Las mamás nos tenemos que escuchar más. Confiar en nosotras. Darnos permiso para acunar, escuchar, contener. Sin sentir que seremos eternas rehenes de nuestros niños.

Es un camino.

Una aceptación social de la crianza con apego, con contacto, con respeto por los bebés y por las mamás que deciden hacerlo de ese modo.

Un camino que podemos ir abriendo de a poco, sosteniendonos entre padres, madres, amigas.
Encontré un párrafo enriquecedor de Laura Lerner Emmer en su libro "Bienamado bebé":
" Para criar es bueno animarse a las secuencias del desórden y órden, a la vivencia de los ritmos, a los momentos caóticos que interrumpen los ritmos, a la construcción de rutinas cotidianas...saber que las rutinas se pueden cambiar...que pronto sobrevienen los quiebres, a que la vida nos lleva hacia territorios cada vez más inciertos..."


viernes, 30 de enero de 2009

Tesoro....



Caminaba lento. Pasos cansados.

Una vida de trabajo. Larga.
Llegó a la Argentina en un barco desde España siendo muy pequeño.

Una familia buscando un futuro. Un lugar.

Me han contado mucho de su historia, pero yo tengo mis registros propios.

Ojos llenos de paz. Disposición absoluta para jugar conmigo en cualquier circunstancia.

Yo: mujer maravilla. El: el malo atado con el lazo de la verdad.

Yo: antojo de ir a la plaza. El: llevandome haciendo un esfuerzo con sus piernas.

Yo: mujer maravilla otra vez. El: el malo que dispara sin éxito porque mis muñequeras le frustran el ataque.

Yo: aburrida. El: juguemos a las cartas.
Yo: huyendo de las obsesiones de limpieza de mi abuela. El: cómplice.

Yo: una nena de siete años. El: mi abuelo Emérito.

Yo buscandolo en la casa, sintiendo que en cualquier momento volvería a aparecer con sus pasos cansados a buscarme para jugar. El.....No podía volver.

Pero dejó esa huella, esas vivencias....

Tesoro grande el de los abuelos que se conectan, disfrutan y regalan estos recuerdos..
Figuras importantes en la crianza. Sostenedoras muchas veces.
Muchos con miradas especiales y disposiciones amplias para el encuentro con los niños.

miércoles, 28 de enero de 2009

Algo de nosotros..


Consulta pediátrica. Eze con dolor de oídos.

El pediatra aprovecha para hacer una revisión completa: "bueno, ya estamos en etapas de crecimiento hormonal importante" . Como verán en la foto no falta mucho para que me alcance en altura...si, ya se que tampoco mido dos metros, pero me dió una mezcla de felicidad y nostalgia. Mi primer bebé, crece y crece. En talla, peso, hormonas y emociones. Ya se plantea donde hacer el secundario, elige según sus intereses, discute y expone sus derechos frente a los demás.
Luisina cada vez buscando mas cositas de identificación femenina. Le enseño peinados nuevos, me pide mis pinturas y prueba. Se mide ropa, se mira, se cambia, prueba diferentes combinaciones.
Alejo, bebotonea..Si, todavía es el bebé de la casa en muchos aspectos. Todos giramos cerca de él y sus necesidades. Sus hermanos lo defienden frente a otros nenes, lo cuidan lo acompañan y el me dice: "Miz hermanoz hazen muchaz cozaz para mi".
Cada uno en sus cosas. Pero cerca. Resonando todos juntos. Vamos creciendo..

martes, 27 de enero de 2009

Cambio de cara..

Ganas de renovar un poco la casita de mi blog.
Buscar colores nuevos, distribución diferente. Es como lo que me pasa con mis otras cosas. Arrancar el año con agenda nueva, diferente a las anteriores. Encarar cosas desde lugares nuevos, renovar mis ganas en el trabajo, la crianza, el contacto con los míos.
Ampliar mis horarios, reacomodarlos. proyectar...
Estoy leyendo cosas lindas, ya les voy a postear.
Pido opiniones de la cara del blog a ustedes que son quienes lo miran siempre..

domingo, 25 de enero de 2009

En esto ando


Las vacaciones...

Tiempos de encuentros y movimientos.


Pienso en las cosas que quiero hacer este año, pero mis horas de compu, blog, libros estan reducidas.

Reencuentro productivo con un primo hermano que esta parando en casa.

Salidas con los chicos. Horas dedicadas a mi amiga Vir, porque cuando arranquemos el año con toda sabemos que nos vemos solo los fines de semana que podemos.

Mas salidas con los chicos, cine, río, pileta.

Ganas de disfrutar todo pero también de volver a mis espacios, esos que son míos. Repensar cuestiones del trabajo, ganas de conectarme con mis pacientes, los que estan por regresar del descanso y los nuevos que vendrán. Ganas de leer tranqui con un matecito al lado los blogs que sigo siempre y comentar con tiempo, conectarme con ustedes.


Armar nuevos posts con lecturas nuevas que voy haciendo y quiero compartir.

Aprender a ser mamá de un preadolescente que por momentos parece sentirse no querido ante los NO. Que reclama cosas diferentes a los otros dos niños de la casa. Crecer....


En eso ando. Descanso del ritmo del año, pero también lo extraño de a ratos...Supongo que así pasa.. ¿No

lunes, 19 de enero de 2009

9 años...

Mañana, 20 de Enero, cumple 9 años Luisina.



















Ya conté en este blog como fue su llegada, el susto que tuvimos a las horas de nacida y las sensaciones raras que me trajo ese episodio.



Cumple 9 años.

Es la mujercita de la casa.

Atenta a todas las necesidades de su hermano menor. Siempre mirando a los que la rodeamos, preguntando si necesitamos de su ayuda.

Con ella comparto esas cosas netamente femeninas: mirar vidrieras por mirar, comentando sobre los colores, el precio y esas cosas.

Luisina es curiosa, ama pintar, cantar, bailar, experimentar con la tierra, los colores, las texturas.

Prueba todo lo que puede, va eligiendo caminos. Es tierna, generosa y divertida.

Luisina no da muchas vueltas; si algo no le gusta o la molesta se le nota y no siente compromiso ni verguenza frente a eso. Es clara y precisa.

Cocinamos juntas.

Miramos programas de "nenas" y nos divertimos mucho.


La hija mujer a las mamás nos lleva a muchos lugares conocidos, de mucha identificación.
Abre puertas bruscamente en nuestra infancia guardada. Nos reflejamos fácilmente en sus despliegues.
La hija se transforma en portadora de deseos, sueños, ideales que podemos desplazar sobre ella sin darnos cuenta. Una hija nos invita a una reparación de ciertas cuestiones de manera diferente a la que vivimos con el hijo varón.
Es hermoso tener a Luisina. Hacer salidas de "chicas", tener nuestros códigos de comunicación.

Per eso en este cumple que ya tenemos cerquita quiero celebrar esas cosas. Ya la historia de sus primeras horas tan traumáticas es eso: una historia.





Feliz cumple Lu... Te amo mucho..

Mamá..

sábado, 10 de enero de 2009

Sin opción


Tocaron la puerta de casa.


Un hombre esperaba mientras los perros le ladraban.


Tenía en la mano uno de esos aparatitos para hacer disparos de medicamentos para aspirar.


Antes de decir. Antes de pedir lo que necesitaba pidió mil disculpas, perdón por molestar, por la incomodidad que podía generar y explicó que no le quedaba otra opción.


Eran cerca de las dos de la tarde. "¿no tendrás aunque sea empezado, no importa cuanto tengas, algo de salbutamol, ese que se pone acá para hacer un disparo? Es para mi bebé, el dispensario ya no tiene más, la dosis es a las tres de la tarde."



La mirada de desesperación, la verguenza por tener que pedir. La angustia. El miedo.


Estas cosas de nuestro mundo. Lo injusto. La humillación.


Tantos papás y mamás representados en ese hombre. En esa mirada y en esas palabras.

Pensé en lo que se sentirá no poder acceder a las cosas básicas, a un remedio para un hijo que lo necesita. Terminar dependiendo de otros, de su voluntad, de sus posibilidades. Temer a la mirada que le puedan hacer.
Esas postales tristes que nadie quiere protagonizar, pero que muchos no pueden evitarlo..

martes, 6 de enero de 2009

El tiempo..


Será cuestión de parar un poco.


Detenernos. Dejar que algunas cosas vayan pasando y disfrutarlas.


Recordar las frases hechas de nuestras abuelas, madres, tías y demás parentela. Esas frases que nos decían "Como creciste" "Eras así de chiquitita". "Cómo pasa el tiempo". "Parece que fue ayer cuando entraste al jardincito..".

¿Quién no ha pensado en esas frases mirando a sus hijos? Y para eso no hace falta que sean muy grandes, ya el primer aniversario es todo un tema: lo vemos andar, desplegar un montón de habilidades nuevas cada día, esbozar palabras a media lengua que solo entendemos nosotras, y nos parece increíble que un año atrás lo recibíamos en este mundo chiquito, indefenso..


Por eso se me ocurre hacer altos en el camino. Disfrutar los momentos con los hijos. Cada etapa de su crecimiento junto a nosotros nos invita a sensaciones diferentes, nos mueve algo de nuestra historia, nos regala vivencias profundas que si aceleramos a fondo nos las perdemos.

Si la ansiedad por las etapas que vendrán nos gana, si nos perdemos la magia de momentos cotidianos y simples ¿qué miramos? ¿qué cosas disfrutamos de ser mamás y papás?.

Las abuelas y las tías tenían razón: el tiempo vuela, así que paremos. Exploremos nuestra relación con los hijos, escuchemos, sonriamos, busquemos divertirnos con ellos, miremos.
No es tan dificil. No hay que dejar de trabajar, ni de ver amigas, ni de tener espacios propios.
Tampoco es cuestión de creer que todo es magia de esa que nos venden las pelis. Hay complicaciones, cansancios, enojos, paciencia que se agota, dudas..Pero de eso se trata la crianza. Y de como seguir.
Momentos..Tiempos...contacto con nuestros hijos.
Algo único que esta bueno no perderse..
Buena semana para todos.

viernes, 2 de enero de 2009

Arranque accidentado!!


Las primeras horas del 2009 nos encontraron en la guardia de la veterinaria.

Si. Las cosas a veces pasan en el momento menos oportuno, todo se da vuelta, lo que planeamos no sale y hay que ver como reacomodarse.
Resumen: antes de la cena en casa con mi familia nuestro perro Potter se escapó, peleó con un perro y corrió hasta una casa vecina, lo corrimos, lo atrapamos y volvió con nosotros a casa. En medio de la cena vimos que sangraba de a gotitas de su mismísimo miembro reproductor..si si del mismo. Ya la cosa fue cambiando de tono: algunos invitados seguían comiendo, Kike y yo improvisamos un vendaje provisorio a ver que pasaba. Potter a nuestra pieza para evitarle los ruidos y los sustos de los fuegos artificiales. Cinco minutos antes de las doce, copas en mano para brindar...: se abre el freezer y sale despedida una botella de cerveza y revienta en el piso de la cocina, me corto un dedo intentando limpiar rápido, voy a mi pieza a lavarme: charcos de sangre en el piso: Potter nervioso y todo un desastre. Las doce ya se habían pasado y nosotros en una dimensión paralela al resto de los presentes sin poder disfrutar nada de nada: Potter a mi baño, limpiar la pieza, llamar a veterinarias sin resultado positivo, los chicos querían tirar los fuegos artificiales, los fósforos no estaban: corridas, nervios y mientras el baño se inundaba de sangre de nuestro perro. Encuentro una veterinaria con guardia y nos fuimos Kike y yo. Anestesia para Potter, unos puntos en su parte interna del sitio ya mencionado y casi dos horas del año nuevo compartidas con el veterinario de guardia y los dueños de otra perra muy lastimada y en shock que llegaron después de nosotros.
Y en ese lugar pensaba en los chicos preocupados por Potter. En la noche de fin de año tan rara que nos tocó. Y en la compañía que nos hacíamos con estos acompañantes casuales. Ellos preguntando por nuestro perro, nosotros por la suya. Dejando al pobre veterinario repartirse entre nuestras mascotas con buena onda y con esa cosa especial que se genera entre gente que esta pasando por algo parecido. Fue solo un ratito pero me disparó esas sensaciones de empatía con los otros, de estar ahí: en un lugar que no planeábamos deseandonos un buen año a pesar del comienzo atravesado...
Volvimos con Potter sedado. Los chicos se tranquilizaron al verlo. Alejo le cantaba y lo besaba, Luisina se sentó al lado suyo y Eze preguntaba detalles de lo que le hicieron.
Mi hermana se había encargado de limpiar el lío del baño.
Al fin: nos servimos unas copas de champagne y pudimos brindar por el nuevo año. Y pedir disculpas a los invitados..
Potter es uno más de nosotros. Así que estamos felices porque está bien.
Son cosas que pasan. Ayer recuperamos un poco: almorzamos todos juntos y la lluvia nos invitó a quedarnos en casa cuidando al accidentado y disfrutando de estar todos acá y poder compartir estas cosas también.